miércoles, 6 de febrero de 2013


¡¡Eh, bisssho!! Que ese boli es mío, ¡¡vamos a llevarnos bien!!

Efectivamente, medio ojo se me estaba abriendo y mi reloj biológico me decía que debían de ser… no sé, las 12 de la mañana. Miro el reloj y ¡zas! Ni de cerca, eran las siete y media! El solazo que entraba en mi habitación era como para no sentirlo.

La casa en puro silencio y no es que no hubiese gente, sino que estas paredes deben de estar hechas con doble capa o que ellos son muy silenciosos. Por ahí andaba ya “Prudence”, que dicho sea de paso, le viene al pelo su nombre, en la cocina haciendo el café. Luego caigo que habría sido el olorcito lo que me ha despertado del todo, ¡qué rico!

Hoy el día ha sido tranquilito dentro de haber hecho unas cuantas gestiones de índole logístico. Tarjeta para el móvil, poner en marcha el ordenador y empezar a ordenar ideas, unas comprillas aquí y acullá para fines varios como higiene personal (champú, jabón, pasta de dientes y tal) y otras con fines organizativos como unas perchas. Que por cierto, para el que esté leyendo, negociazo vender perchas, ¿eh? Me han costado 5 perchas, 5 dólares. Ahí es ná. ¿Pero África no era barata? Excuse señorita, nadie le habló de perchas.

Algo que me ha llamado la atención es que en todas partes donde compras algo, a la salida del local de turno siempre hay un amigo moreno que te revisa lo que has comprado y chequea con el ticket. Ojito con perderlo, que no sales vivo. Bueno, exagero un poco, lo máximo que puede pasar, supongo, es que te vayas como has venido, con menos pasta, eso sí.

El supermercado de la zona ha sido una experiencia cuando menos curiosa, la mezcla más variopinta de cosas y personas. Algunas me han recordado a las rarezas gambianas. Léase el jabón que utilizan esta gente, que es negro…. ¿Por qué será? ¿Temerán que se les borre el color?. Ah, y azul eléctrico… será para los reflejos cuando les da el sol en la piel y así están más bonitos. Que ya lo son.

Son bonitos y bien hechos. Vaya cuerpazos, es increíble el tono muscular de unas y otros, esas pieles perfectas y encima con esos colores que se ponen que te dan ganas de darles un bocado. Que por cierto, hoy, tal y como prometí a mi hermano mayor, me he puesto las zapatillas que con todo cariño me hizo él y me ha llamado la atención que me hayan preguntado varias personas por ellas. Éxito aplastante. Será porque están pintadas con sus colores. Negro, rojo, amarillo, verde,…. Son la caña, la verdad. Luego colgaré una fotillo. Pero lo curioso es que me lo han preguntado los propios locales. Ah, aparte de decirme a modo de despedida después de averiguar que soy española: “oh nice, ok see you, te quiero”. Y ya van tres que lo dicen. Es como en Gambia con el “No passa nara”, cogen una frase y no la sueltan. Pero lo de “te quiero” ya es mucho. La pena es no saber si te lo dicen en serio, como no se nota si se ruborizan… jejeje…

Antes de volvernos a casa a comer, he ido con María (african mum) a INTENTAR pagar unas facturas de luz y no sé qué cosas… y bueno, con las mismas nos hemos vuelto, sin poder hacer gestión alguna. Ahora, no te harán la gestión, pero organizado está, ¿eh? Entras y si te toca la última te tienes que sentar en la banqueta más lejana de la “ventanilla” y si te toca la siguiente, te mueves a un puesto más cercano. Nada de llegar, sentarte en un sitio y no moverte de allí hasta que te toque el turno. No, no… de eso nanai. Mueves el trasero y te cambias de silla. Aquello parecía el juego de las sillas. Pero sin música. Me ha parecido divertido, aunque ellos se lo toman muy en serio, que la burocracia es la burocracia.

Al volver a casa, chaparrón de tropocientos litros por metro cuadrado. Qué barrrrrbaridad! Eso me ha hecho recordar el último día en Gambia que pasó igual y mi prima Rocío y yo tuvimos la brillante idea de bañarnos en la playa, con el consiguiente nerviosismo de los lugareños que ya estaban viendo en los titulares: Dos catetas andaluzas mueren fritas por un rayo en las costas gambianas, en su salsa, sí, pero muertas perdidas.

Pues bien, después del tormentón ha venido la calma, y como estaba ociosa he decidido cargarme unas cuantas cosas, hacer la entrada del blog, bichear alguna cosilla por internet… Que por cierto, aviso a navegantes, siento si no contesto a todos los mensajes de whatsapp porque que sepáis que para estar conectada con el móvil, tengo que ponerme en el centro del jardín, haciéndome la muerta para no “interrumpir” la delgada línea wifi que con un estornudo dejas sin red a medio pueblo.

Ya luego con el ordenador he tenido que “mudarme” a casa de mi african tía y mi african primo. Ella no estaba, así que hemos compartido Marcel y yo una tranquila tarde de blog yo y de película de acción él. Bibi por cierto, justo cuando me has intentado llamar por skype he tenido que colgarte porque no quería ponerme ahí a charlar y molestar el visionado de la peli del mussshasho. ¡A ver cuándo podemos! ;)

Y cuando ya creía que me podía comer un ñú empanado, ha venido justo, como enviado por los dioses, JL a rescatarnos de la hambruna e ir a cenar (siete de la tarde), a un chino. China decoración, china comida, pero cocineros y camareros como el carbón, oyessss. Ha sido interesante en el camino hacia allí, el rocambolesco proyecto genético imaginario que nos hemos montado Elena (african tía) y yo sobre lo interesante que podría ser el cruce de un negro con una china. Rasgos chinos, piel negra. Pero para ello teníamos que hacer los cruces bien pensados. “Organizarse joé”… primero eso, y como la ley genética nos dice que serían más bien café con leche, en la siguiente tanda tendríamos que meter oootra vez un progenitor negro. Y así, total, que hemos llegado a la conclusión de que para ello necesitaríamos unas cuantas generaciones y para entonces, no llegaríamos a ver los resultados. Menudas Mendel de pacotilla.

Por cierto, la cena riquíiiisima. Y como no les dejan vender alcohol, hemos ido nevera en mano con botella de vino y cervezas en ristre. Igualito que en otros sitios más “civilizados”, que atrévete a comerte unas pipas en la mesa de un sitio donde no las hayas comprado...

Durante la cena ha sido divertido ver que mi abuela africana (Carmen), se empeñaba en no comer NADA que se pareciese al pollo porque podía ser cocodrilo y de eso nada, tú. Que aunque ella no note la diferencia, por si acaso se la dan con queso, ella de carne de cocodrilo ni hablar, que no veas la peste que echan esos bichos en vida. Claro está, no me he podido reprimir preguntarle si le gusta el jamón serrano. Eeeeeh, ahí “t’hedao!”

Y bueno, por hoy basta, ahora me pondré a leer un ratín con un bicho muuuuy raro cantando al lado de mi ventana. Aquí DEFINITIVAMENTE se me tiene que quitar el miedo a la oscuridad y a los insectos pocos familiares, porque si no, lo tengo crudo.

Buenas noches tengan ustedes, señores lectores.

FOTOS DEL DÍA: 

Eh, eh, sin copiar!!!

Las zapas de mi bro

Mis "fans" en Lola's

Acordándome de Pato. (de extremadura, Pat!)

Mater, y creíamos que no habría tijeras, poh toma dos platos

Y si en caja te entra hambre, siempre puedes comprarte una hamburguesa de mortaleda lista para llevar, jaja!

Los jabones, no siiii.........

Boniiiiita!

Elena y Marcel (mis african tía y primo)

6 comentarios:

  1. Primassaaaaa, mira a ver cómo compras que te pueden clavar por ná y tú pensando que así es la cosa. Si vas a un mercadillo o cosas así sin nadie que conozca los precios, aumentan las probabilidades de un zass!

    Oye pero que me encantan las fotos tú. Todo se ve limpio. Cómo están las cosas en ese aspecto?? Lo de Senegal no tiene nombre!!

    Bessottttes...

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    1. Pues la verdad es que está bastante cuidado todo, bueno, tú ya me entiendes, dentro de estar en África y que todo más o menos tiene sus contras y alguna que otra vez veo montañas de basura por ahí, pero por ahora todo está dentro de un orden bastante bastante aceptable!! qué tal por Senegal?

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  2. Ya decía yo que no tenía respuestas en elmail, si no había puesto más que mi nombre!

    Pues hace ya un par desemanas que estoy en Tfe. Senegal ahora mismo chungo, la verdad. El pais está demasiado mal llevado y los cambios que está habiendo no se sabe a dónde van a llevar. Yo además cuando estaba aportando algo a la comunidad estaba mucho mejor. Ahora, más metido en el rollo familiar y de simplemente "estar", cada vez lo llevo peor. Además de mi mujer, todo el sentido de la experiencia como africano para mí radica en la posibilidad de aportar valor. Me gustaría estar en posición de hacerlo de nuevo, pero de momento todo es cuestiónde buscarse los garbanzos!

    Muchos besitos prima, te seguimos fielmente!! Y me encanta porque esto de las primeras impresiones que cuentas me suena un montón a mí!!

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    1. Bueno, pues véme contando qué tal todo, suerte en tu búsqueda! y bueno, si vienes por la "zona" ya sabes, avísame!! jajaja y eso de que te recuerda a ti, ya sabes, quien no se parece a su familia, es un cerdo jejejeje un besote!!!

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  3. Hola Guapa,

    Cómo me ha gustado leer este mail, cómo me suena todo, jeje... y, sinceramente, tras leerte la melancolía me ha inhundado. Es verdad, que los supermercados son curiosos y el revisor del ticket un puntazo, jijiji. Yo me sentí tan libre allí, en las personas, en la calle, se respira un positivismo y una cálidad energía que te contagia. En este mágico lugar, los planes llegan en cualquier lugar y en cualquier momento. LAs fotos muy bonitas, me encantó ver a Elena (soy fan de esta mujer, gran luchadora, de gran vitalidad y muy muy libre, original si más cabe... resumiendo, es genial) y a Marcel (al que no tuve el gusto de conocer en persona-. Seguiré tu aventura africana desde Ánclate y te deseo que cada día una sonrisa llegue a tu puerta. Un fuerte abrazo. Raquel

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    1. Muchas gracias Raquel!!! por aquí todavía te recuerdan y mencionan de vez en cuando. Chenai sin ir más lejos ayer! Y efectivamente, Elena es para no separarse de ella ni un segundo! tiene taaaaaaaaaaaaaaaanta historia a sus espaldas que no hay detalle de su vida y su forma de ser que no merezca la pena absorver. Y Marcel, imagínate, ha tenido esa misma vida junto a su madre y no se puede ser más genial, encantador, educado, gracioso... en fin, que otro que merece la pena tener al lado y no saltarse ni un detalle. Muchas gracias por seguirme! me hace ilusión saber que no os aburrís con el blog jajaja!
      Te iré contando si al fin pruebo los gusanos jajaja..... ;) Un besazo!!!!

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