martes, 5 de febrero de 2013




¡Victoria!, ¡¡al fin he llegado a Idem!!

Bueno, pues aquí me hallo, después de toda la locura con los preparativos, los nervios de los vuelos y 19 horas y media de interminable suplicio, al fin piso tierra firme! (africana, bwuana)

Allá que me iba, con más miedo que vergüenza, chutadísima de lexatín,…que no sé yo dónde se me quedaron los efectos al llegar al aeropuerto, cargada de maletas y llevada cual princesa (sevillana), en esa especie de tanque apisonadora de mi primo Carlos, con la sevillana que más podía gustarme en ese momento “Por la bahía” a toda pastilla, como buenos macarras andaluces… y mi hermana en la parte de atrás grabándolo todo a la “americana”. Un cuadro digno de ver, vamos.

Después de “endiñarle” los dos maletones a British Airways y no pagar ni un pound extra (haciendo pupita en venganza por lo de Iberia! Juajua), despedida breve y foto choni de recuerdo, me quedé vendida a mi suerte, sola ante el peligro… de los aviones, claro, que todo el mundo sabe que los carga el diablo.

Menos mal que un flaco amigo mío, que tiene contactos hasta en el infienno, me puso en contacto con los pilotos que me daban el primer salto. Gracias a ello estuve de cháchara con Antonio y Ariel en la cabina, como si fuese una famosa, y pude pasar el primer trago, con cacahuetes de regalo incluidos, jaja! Oye, que valga el apunte que estos pilotillos se ponen ahí como en el salón de su casa y no sé, como que a mí todos los botoncitos me parecían iguales, y ellos ahí raja que te raja mientras les decían por la radio en un inglés afrancesado que se dejasen de rollos con la sevillanita y que mirasen p’alante…, total no sé para qué, no se veía nada. Mucha nube, eso sí. Desde aquí les doy las gracias a ambos, que fueron superamables y me hicieron ese ratito de lo más ameno.

Ya el vuelo Londres-Johannesburgo es otra película. Perdonen, pero me pregunto a quién, en su sano juicio, se le ocurriría inventar un avión de DOS PISOS… y nosecuántos metros de largo… y nosecuántas filas de lado a lado del avión. A ver, que venga un físico y melosplique, porque casi me da un derrame cerebral cuando fui consciente de que tenía que meterme AHÍ…Pero gracias a que a veces me dan arrebatos de educación y vergüenza torera, decidí sobre la marcha que montar el pollo y no subir, no iba a ser una buena idea. Pues bien, una vez dentro, qué le íbamos a hacer, ¡pues no dormir! Nunca en mi vida he visto tantas películas seguidas y no enterarme de la mitad por estar pensando en mi propia integridad física. En fin, doctor, quíteme este suplicio de la cabeza que me veo anclada, sí, pero en África para siempre!

Y al fin, con un sueño que no se lo saltaba un camello, boing… a turbulencia perdida pisamos la tierra que antaño los ingleses llamaron, cómo no, algo con “Victoria”… no sé qué tendría esa reina que está África plagada de rincones en su honor, MALDITA, sería una egocéntrica de aúpa. Pero sí, me vino muy bien la redundancia… ¡¡¡VICTORIA!!! ¡YA ESTOY EN VICTORIA!

Una vez en tierra, lo primero que veo: una hilera de avionetillas ideales de la muette que trajeron a mi memoria a mis queridos Juan y Jonás,…aysss chicos, me decían con los ojitos que andestábais… yo no digo nada, pero doy fe, haberlas, haylas. Tósponerse.

Previo pago del ineludible y tedioso papeleo de visado, cual heroína que acaba de conquistar medio mundo, paso firme y cara feliz, entraba por la puerta grande de todo este proyecto,… y mis padres africanos ahí, como si tal cosa, felices de recibirme y riéndose del gesto de corderita degollada que debía tener. No me lo creo, YA ESTÁ, se acabó la espera.

Besos, abrazos y arriba p’al coche. Todo me parece precioso: la vegetación, la gente, las bicis, los caminos sin asfaltar, los carteles de precaución con los elefantes, impalas y demás bichejos, hasta el cielo era bonito, ése que hacía menos de una hora, y durante diecinueve, había sido mi enemigo.

Qué gente más estupenda me ha tocado de familia africana, ellos y sus allegados. Además, se ve que durante estos años, con esa simpatía, se han hecho una fama entre sus conciudadanos. Parecíamos la comitiva real, saludos, besos y presentaciones. Han faltado las genuflexiones típicas, pero eso desde que recuperaron sus tierras estos morenitos adorables, ha pasado a mejor vida. Bien está ahí.

Primera parada, a comer en el “Lola’s”, lagrimón mío al ver ya mis abanicos ahí expuestos, como si ya llevase aquí todo el tiempo. “the new spanish girl, Nerea, the fan maker”, iba siendo la presentación,… ay, que me echo a llorar! Y todos, “oh yes!!” ¿Mande? ¿¿¿Es a mí???... Pues sí, toda una emoción.

Tras una comida con tutta la familia (léase Jose Luis y María José, su hermana/cuñada, el hijo de esta última y la madre de María José) Pantendernos: mis padres, mi tía, mi primo y mi awela, de vuelta al hogar a terminar de colocarlo todo. Y entre comida y cena, maletas e historias, un déjà vu: partida de parchís. Como entre los Coca, y porque no teníamos cartas, que si noooo…. Jejeje Y no, si alguien se lo pregunta, no he ganado. PORCA MISERIA! Ya es sabido entre mi familia el mal perder que tengo, y erre que erre, que no gano nunca, oiga.

Mientras hacíamos la cena (barbacoa de mazorcas de maíz, croquetas caseras riquísimas y ensalada) un poquito de stories telling de mi padre africano, de ahora en adelante JL y el mágico rumor de las cataratas de banda sonora. De película, ¿que no? Me arrepiento enormemente de no haber traído la grabadora, porque JL cuenta siempre cosas interesantísimas y con mi memoria de pez, pues eso… que a ver si alguna de ellas os las puedo ir contando.

Creo, que para ser el primer día, ha sido genial y suficiente, y eso que no me quedaban fuerzas salvo para comer y respirar.

Hoy pronto a la cama, que por lo visto aquí se amanece a las seis al son de la fauna y con el solano africano entrando cual elefante en una chatarrería directo a tu pupila. Welcome to L’Afrique.

Dream ON. (En todos los sentidos).

FOTOS DEL DÍA:

Aeropuerto de Victoria Falls

Camino de la ciudad, todo verde por las lluvias
Mi primo a la rica mazorca
BBQ
La cena

6 comentarios:

  1. Que emoción Nere!! Nunca te canses de escribir, por favor. Cuantanos historias y así podremos soñar contigo... Dream ON!!!! María Parejo

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    1. Siiii no lo dudes, Mery!! seguiré escribiendo, y a pesar de arriesgarme a que tu madre me mate, AQUÍ TE ESPERO!!!!! JEJEJEJE un besazo, amore!!! Dream ON!!

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  2. Me quedo sin palabras.
    ¡Que suerte ser tan disfrutona! Menos mal que a través de este blog podemos compartir tus experiencias.., y vivirlo un poco también aunque sea en la distancia...algo es algo.
    Besossss!!!

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    1. Bueno, ya se verá si el "disfrutarlo" se queda en la distancia o si alguna vez puedes venir para acá! (si eres mi madre y no mi prima, ...), decirte que aquí hay más de uno y dos y tres,.... que han llegado desde Europa atravesando África en coche... ahí dejo eso. jeje

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  3. Siiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!!!!!!!! la creadora de abanicos ha llegado!!!!!!!!!! walaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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    1. jajajaja pero quién eres??? eso del anónimo no me da mucha pista!! jajaa

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